He tenido un Agosto bastante viajero, y he desatendido este blog, que ha estado prácticamente inactivo durante varias semanas. La buena noticia es que he recabado experiencias muy interesantes, y algunas fotos maravillosas, que os iré contando y mostrando en las próximas semanas o meses.
Curioso bronceado el de la vicepresidenta, en la primera Rueda de Prensa tras el Consejo de Ministros de este viernes. (Fuente: lavanguardia) |
El Gobierno, a pesar de la que está cayendo, también se ha tomado unas breves vacaciones, prácticamente sólo unas dos semanas de baja actividad. Gracias a eso, la Bolsa ha subido un poco y se ha relajado la prima de riesgo. Supongo que habrá otros factores, pero me gusta pensar que la ausencia de gobierno (como en largas etapas de la Italia de la segunda mitad del siglo XX) facilita que las cosas en general vayan a mejor. Sin nadie que lo j..., las cosas buenas asoman su cabecita.
El efecto es parecido a cuando dejamos de empujar un flotador hacia el fondo del mar: de modo natural, vuelve a la superficie y flota, que es su vocación.
He hecho bastante Turismo de Interior este mes de Agosto. Y las carreteras las he visto más despejadas de lo habitual, y los hoteles medio vacíos. En aquellos lugares que no frecuenta el visitante internacional, las cifras de descenso en la ocupación me temo que serán dramáticas. Claro que cada vez que he tenido que acercarme a una Estación de Servicio he tenido que sacrificar los Menús del Día de toda una semana. En ningún lugar he tenido que esperar ni un minuto para comer o cenar.
Por su parte, la vicepresidenta, en la rueda de prensa ya de nuevo habitual en este viernes de dolores, nos ha mostrado un curioso bronceado, fruto sin duda de aceleradas exposiciones al Sol, con gafas de protección.
De todas formas, la tónica sigue siendo la habitual: cada vez que habla el Gobierno sube el pan. Y eso vale también para los funcionarios gobernantes de la Unión Europea, por Bruselas o Frankfurt. Hasta cuando los primeros espadas se toman unos días de descanso, siempre hay algún segundón a quien le ha tocado quedarse de retén, y no para de soltar bombas por esa boquita. Parece que tuvieran por misión pegarle un empujón al flotador cada vez que aparece por la superficie.
Con todo esto, la pena es que no tenía liquidez para haber especulado con las acciones de Bankia. Con buena cintura, se podían comprar un día a 50 céntimos, y venderlas pocas fechas más tarde por el triple. Pero la maldición que sufren los ricos, que les condena a seguir siéndolo, incluso de modo obsceno, parece que también aplica a los pobres. Mi única alegría (económica) en estas fechas vacacionales ha sido un premio de 30 euros por haber conseguido cuatro aciertos en una Bono Loto. Que ya podrían haber sido cinco, (si en vez de tener un 14 hubiera tenido un 12) y haber ganado unos jugositos mil euros. Pero no, de nuevo empujón al fondo cada vez que asomas la cabecita.
La última ocurrencia del gobierno es castigar a los jóvenes que se ven obligados por las circunstancias a bajar la cabeza y volver a instalarse en el nidito familiar de sus padres. Además, verán como la magra ayuda de 400 euros desaparece también junto con su orgullo. Claro que el razonamiento del Gobierno es impecable: esos 400 Euros (o hasta 450 si hay que alimentar a otras tres bocas: poco van a comer los cónyuges y los hijos) son para garantizar la ayuda mínima de supervivencia. Y esos jóvenes que regresan a los hogares familiares, que retoman las lentejas de mamá, seguro que los emplearían en copas y botellones y darían mal ejemplo.
En fin, nos queda una semana de Agosto, y lo más crudo regresará de nuevo a la actualidad. La agresividad de Ana Pastor ya ha desaparecido de las mañanas de TVE, nos tocará tragarnos toros como venganza imperial, sólo los periodistas mansos y obedientes tendrán cabida, y pronto veremos en qué consiste, de verdad, ese Rescate del que tanto se habla y que tantos han desmentido. Y asistiremos a unas elecciones en el País Vasco, cuyo resultado es incierto y cuyas consecuencias serán imprevisibles.
Grecia seguirá en el alero (bueno, al Panathinaikos prácticamente le ha eliminado ya el Málaga) y la Liga, me temo, seguirá siendo un mano a mano entre el Real Madrid y el FC Barcelona, y los demás tendrán que luchar por el tercer puesto.
Volveremos a la normalidad y dejaremos de sudar sudor (por el calor que nos ha azotado este mes) y empezaremos, de nuevo, a sudar tinta para intentar llegar a fin de mes, con el IVA por las nubes y la gasolina a precio de joya exótica.
Pero fue bonito mientras duró.
JMBA
Está simpático eso del flotador... Yo, a partir de mañana, voy a practicar el buceo a pulmón libre. Por cierto, ¿tú cuanto aguantas sin respirar?
ResponderEliminarPues como todos, Seve: hasta que me muero.
ResponderEliminarNo pueden acabar bien los tiempos en los que a veces se alegra uno de ser viejo.
ResponderEliminarBonito este artículo, aunque sea de politiqueo. Lo del flotador muy gráfico pero creo nosotros, españolitos de a pie con flotador o sin nos vamos al fondo... y sin rescate
ResponderEliminar