14 de Julio: Fiesta Nacional en Francia

Desde 1880, el 14 de Julio es la Fiesta Nacional de Francia. El 14 de Julio de 1789 se produjo la famosa Toma de la Bastilla, que marcó el inicio de la Revolución Francesa. Aunque la Bastilla, en ese momento, sólo custodiaba a siete presos, su toma por los revolucionarios de París marcó el fin del Antiguo Régimen.

Fiesta de la Federación en el Campo de Marte,
14 de Julio de 1790
(Fuente: Wikipedia)

Sin embargo, la Fiesta Nacional se instauró como conmemoración de la Fiesta de la Federación, que se celebró un año más tarde, la fecha coincidiendo a propósito con la toma de la Bastilla, un año antes. El 14 de Julio de 1790 tuvo lugar, en los aledaños del Campo de Marte, la celebración gigante en la que desfilaron hasta 100.000 federados, con sus tambores y banderas, ante cientos de miles de parisienses enfervorizados. Por cierto, recordemos que, en esa época, la Torre Eiffel todavía NO existía.

Luis XVI se sentó en el pabellón que se había erigido a propósito frente a la Escuela Militar. Y prestó ese día juramento a la Nación y a la Ley. Conviene recordarlo, porque el Rey no fue decapitado el primer día de la Revolución, sino que siguió siendo rey de los franceses hasta 1792, y no fue guillotinado hasta Enero de 1793. En esos años hubo toda clase de negociaciones y componendas, incluyendo la huida del Rey de París, para reunirse con un ejército afín. Pero fue detenido en Varennes-en-Argonne (episodio muy bien contado por Ettore Scola en su película La Noche de Varennes de 1982). Luis XVI todavía juró la Constitución de 1791, y sólo un asalto al Palacio de las Tullerías acabó con sus huesos en la cárcel, fue juzgado y finalmente ajusticiado el 21 de Enero de 1793.

Aglomeraciones en los Campos Elíseos, para ver el
desfile militar del 14 de Julio
(JMBigas, Julio 2006)

En 2006 tuve ocasión de coincidir en París con unos amigos por estas fechas. El día 14 por la mañana, mis amigos querían visitar no recuerdo qué, que yo ya conocía. Quedamos para comer al mediodía, y yo me fui a ver el ambiente por los Campos Elíseos. Allí se desarrolla cada 14 de Julio el desfile militar de celebración de la Fiesta Nacional, por tierra y por aire. En conjunto, representa una auténtica ceremonia de apoteosis tricolor. En el Arco de Triunfo se despliega la bandera francesa más grande que yo he visto nunca, pues ocupa la totalidad del vano central del Arco.

La circulación estaba suspendida en toda la zona, y los Campos Elíseos y la Plaza de la Estrella estaban acordonados y muy vigilados por las fuerzas policiales. Había mucha gente para ver el espectáculo, entre los que se contaban, seguro, muchos turistas curiosos como yo, pero también muchos habitantes de la Île de France, la región parisiense. Me produce envidia ver los pocos complejos que tienen los franceses en exhibir la bandera nacional, en dar vivas a su país y en alentar a sus Fuerzas Armadas.

La bandera francesa más grande que he visto nunca
colgaba en el interior del Arco de Triunfo
(JMBigas, Julio 2006)

Especialmente viviendo en España, donde las banderas se exhiben habitualmente contra alguien, los vivas despiertan toda clase de sospechas,  y parte del Ejército todavía protagonizó un conato de golpe de estado torticero hace 30 años.

Claro que la última guerra civil en Francia se produjo hace más de 200 años, puesto que sobre el tema del colaboracionismo del régimen de Vichy pasan como de puntillas. Es pasto de estudiosos e historiadores, pero no despierta emociones en el pueblo llano (salvo, quizá, las reivindicaciones de las familias de judíos que fueron enviados a Alemania y a la muerte casi segura). Mientras que en España seguimos siendo emocionalmente fratricidas, y los de Villaburros de Arriba están convencidos que los de Villaburros de Abajo no deberían tener ni derecho a vivir.

El 14 de Julio se convierte en una
apoteosis tricolor
(Fuente: turismoporfrancia)

La noche de ese 14 de Julio nos fuimos mis amigos y yo para ver el festival de fuegos artificiales en la Torre Eiffel. Previendo avalanchas, la estación de Metro de Bir-Hakeim (la más próxima a la Torre) estaba cerrada. Creo recordar que fuimos a Trocadéro y bajamos a pie hacia el río, hasta que la multitud resultó impenetable, y nos acomodamos lo mejor que pudimos para ver los fuegos y la iluminación de fantasía que esa noche tenía la Torre Eiffel.

Tras terminar el acto, nos quedamos por la zona tomando algo. Cuando quisimos volver al hotel, el Metro ya estaba cerrado, y no había un solo taxi a la vista por las cercanías. Iniciamos el camino andando, para ver si teníamos suerte. Tuvimos que andar casi hora y media, hasta que en las cercanías de la Madeleine, conseguimos un taxi libre que nos acercó al hotel. Le comentamos el problema que habíamos tenido al taxista y nos dejó claro que, esa noche, los taxistas pasaron de acercarse por la Rive Gauche en general, demasiado jaleo. Así de señoritos son, todavía, los taxistas en París. Pocas licencias, muchos clientes, y son los taxistas los que eligen pasaje y destino (especialmente por la noche) y no al revés.

Esto es lo que pude conseguir de la iluminación de fantasía de la
Torre Eiffel, la noche del 14 de Julio
(JMBigas, Julio 2006)

A pesar de las incomodidades, resultó interesante pasar un 14 de Julio en París.

Aunque no consiguiéramos Tomar la Bastilla.

JMBA